lunes, 28 de enero de 2013

lunes, 21 de enero de 2013

LO QUE HAN DICHO LOS LECTORES

Aquí os dejo las opiniones que me han hecho llegar algunos de los lectores de Kichay.
Muchas gracias a todos:

"Me ha encantado por su bella factura, su ingenio y su sorprendente mundo de asociaciones humanas y sociales"
(José)


"Mis más sinceras felicitaciones. Gracias a tu trabajo, gracias a la imaginación, gracias a tu visión de la realidad, gracias a la valentía. Lo recomendaré"
(Rocío)


"Destacaría con agrado que el escritor tiene la habilidad de enganchar y mantener la expectación del lector en todo momento, así como la facilidad de recrear las situaciones de forma que te sumerges de lleno en ellas. Quince pequeñas historias para saborear poco a poco, que invitan a la reflexión y despiertan sentimientos, un libro entrañable. Enhorabuena a Alejandro por este segundo libro. Esperando ya el siguiente".
(Oscar)

"En Miradas de ébano te atrapaba la historia. En este tu manera de escribir es aún mejor. ¡Enhorabuena!"
(Vanesa)

"Temas como la muerte, eje de muchos de los relatos, la fantasía, la resignación o la venganza, ocupan el núcleo central de la obra, entrelazados de una manera magistral que mantiene al lector enganchado de comienzo a fin"
(Carmelo)

"A veces los relatos son breves exposiciones, otras te impresionan por un giro inesperado, algunas te hacen sonreír pensando en una especia de justicia literaria, pero todos te deja poso de alguna forma. Creo que eso es lo mejor que le puede pasar a un relato. Que perdure por una u otra causa en tu memoria. Y varios de los relatos que conforman este pequeño libro lo consiguen."
(Algo más que libros)

"Ya terminé el libro y me gustó mucho. Es bastante original y entretenido. ¡Enhorabuena!!"
(Laure)

"Cada uno de los relatos esconde un sentimiento en estado puro, a veces agradable y otras un tanto incómodo, pero siempre con una historia contada de una manera sublime y con un toque de fantasía que resulta impresionante"
(Zeno, Lo que leo y punto)

"Creo que el autor demuestra tener una mente inquieta y con ganas de contar cosas. Lo hace de tal forma además, que expone un tema sin dejarse llevar por su propia opinión pero que a los lectores nos deja algo sobre lo que reflexionar".
(Patricia)

"Como todos los libros de relatos puedes empezar Kichay por donde quieras, pero ya no podrás parar. Todos los relatos tienen un final sorprendente, capaz de arrancarte una sonrisa, una reflexión o un pinchazo en el estómago"
(Bárbara)

"Es algo mucho más pulido, más literario y más profundo que Miradas de ébano. Que juego dan tus textos cortos, y las metáforas que planteas sobre la vida, la muerte y otros aspectos".
(Jaime)

sábado, 5 de enero de 2013

Relato: AMOR DE CUENTO



_ No sé qué hacer, tía, claro que me gusta pero es complicado, se van a reír todos de mí en el insti –. Bella se atusa el pelo con una mano y con la otra saca un cigarro del bolsillo. Está sentada en el respaldo de un banco. Corre un viento ligero que mueve las ramas de los robles. Vuelve a colocarse su larga melena -. Nunca me había fijado en él hasta el año pasado. Me ayudó mucho con las clases de mates, ya lo sabes, pero nunca pensé que pudiera enamorarme de él. Voy a verle muchos días, en secreto, claro. Me encanta escuchar sus historias, la calidez de su voz. Pero siempre le veo en su casa, nunca en la calle. El otro día me invitó al cine y le dije que no podía, aunque en el fondo me muero de ganas de salir con él. Lo que pasa es que me da miedo que alguien nos vea.
_No sé por qué tienes tanto miedo – Tetera ha estado escuchando a Bella en silencio todo el rato hasta que, al fin, se ha decidido a intervenir.
_¿Qué por qué tengo tanto miedo? – Bella se indigna ante la observación de Tetera-. Soy la jefa de las animadoras, la primera de la clase, la rubia por la que suspiran todos en el barrio. ¿Sabes lo que dirían si me vieran con él?
_¿Y por qué te importa tanto lo que digan? – le replica de nuevo Tetera -. Bestia es un tipo majísimo, qué más da lo que opinen los demás.
_ Ya lo sé, tienes razón – responde Bella ahora con más humildad -, pero no puedo evitar pensar en lo que dirían mis amigas si comenzase a salir con el chico más gordo y feo del barrio. Tiene la cara llena de granos, el pobre.
_Pero, ¿a ti eso te importa?
Bella mira en silencio a Tetera. Enciende el cigarro que aún sostiene apagado en su mano y aspira una larga calada.
_A mí no me importa – responde finalmente con aparente decisión -, la belleza está en el interior y Bestia tiene un interior hermoso. Es generoso, divertido, inteligente. Nunca nadie me ha tratado tan bien como él.  
_ Bien – Tetera le mira complacida.
_Pero la cosa es que mis amigas no piensan así. Un día les dije que había hablado con él, simplemente, por decírselo, y tenías que ver cómo se pusieron.
_ ¡Pero se trata de ti y de tus sentimientos, maldita sea! – Tetera pierde repentinamente los nervios -. ¡Qué más da lo que piensen ellas!, ¡despierta!
_ Si en el fondo estoy deseando besarle – le responde Bella entre sollozos.
_¿Y por qué no lo haces?
Bella se levanta de un salto y lanza el cigarro a la hierba.
_Tienes razón, tienes razón. Voy a hacerlo.

Mientras camina hacia la casa de Bestia, Bella va pensando en lo felices que van a ser juntos. Se imagina la alegría de él cuando ella le declare sus sentimientos y ambos se fundan en un beso como el de las películas de Disney.
Aporrea la puerta de su casa pero huye corriendo al instante. ¿Cómo le va a declarar su amor? Va a ser el hazmerreir del instituto. No, no debe darle importancia a lo que piensen los demás, es verdad. Tetera tiene razón.
El pobre Bestia, siempre marginado, será dichoso por fin junto a ella.
Regresa y vuelve a llamar a la puerta.  Los escasos segundos que él tarda en abrir, se le hacen eternos. Cuando por fin lo hace, Bella le planta un sonoro beso en la boca. Después coge su mano y le mira fijamente a los ojos.
_ Siento no haberme decidido antes, pero ya es hora. Me gustas, Bestia. Me gustas mucho. Vamos a ser muy felices, ya lo veras.
Él la mira con ternura y se separa ligeramente. Suelta su mano con delicadeza.
_Verás, Bella – su voz suena insegura -, a mí también me gustas…pero de otra manera. Creo que estamos bien como amigos.

Quince minutos más tarde, Bella camina malhumorada hacia casa cuando descubre a Tetera que aún está sentada en el mismo banco del parque. Tetera también la ve.
_¡Cuéntame! ¿Cómo ha ido todo? – le grita entusiasmada -, ¿qué te ha dicho Bestia?
_¿Bestia? Pff, ¿a quién le importa la opinión del chico más gordo y feo del barrio?, ¿has visto cómo tiene la cara de granos?